La diabetes es una enfermedad crónica que se caracteriza por un aumento del nivel de azúcar en la sangre (glucemia). La insulina es la hormona encargada de controlar la glucemia.
Cuando el páncreas produce insulina de manera deficiente o no la produce, estamos en presencia de la diabetes tipo 1. Para su tratamiento se requieren inyecciones de insulina de por vida.
La diabetes tipo 2, en cambio, se produce cuando el cuerpo no utiliza la insulina de manera eficaz y es prevenible si se adoptan hábitos de vida saludables como por ejemplo:
- Realizar actividad física regularmente
- Evitar fumar.
- Mantener un peso corporal normal.
- Llevar una dieta rica en frutas y hortalizas, con pocos azúcares y grasas saturadas.
- Reducir el consumo de sal.
Complicaciones
Si el azúcar en sangre no se mantiene en niveles aceptables, con el paso del tiempo la diabetes puede ocasionar:
- Enfermedades cardiovasculares como ACV o cardiopatías.
- Problemas de cicatrización, ulceras, generalmente en los pies).
- Pérdida gradual de la visión. Ceguera.
- Mal funcionamiento de los riñones.
- Entumecimiento, dolor de pies y manos.