El cáncer de cuello de útero es causado por algunas cepas del Virus del Papiloma Humano (HPV). Este virus se transmite sexualmente y es muy común. Por lo general, desaparece solo a los dos años de haberlo contraído, pero si persiste puede causar lesiones en el cuello del útero. Estas lesiones con el paso del tiempo pueden transformarse en un cáncer.
En la mayoría de los casos no hay síntomas tales como dolor o irritación que permitan sospechar el comienzo de la enfermedad. Por esta razón, es necesario realizar controles de rutina que permitan la detección temprana y un tratamiento a tiempo.
Prevención
Como la transmisión del virus se produce por vía sexual, la primera forma de prevención es la utilización de preservativos durante las relaciones sexuales (tanto para el HPV como para la transmisión de otros virus).
Además, la realización del Papanicolaou o PAP permite analizar en el laboratorio las células del cuello uterino y su transformación.